El fuet, ese embutido icónico de la gastronomía catalana, se ha ganado un lugar especial en nuestros corazones y platos. Tradicionalmente, lo hemos disfrutado crudo, cortado en rodajas finas que desaparecen en un abrir y cerrar de ojos durante reuniones, como una tapa o aperitivo irresistible.
Pero, ¿sabías que el fuet es mucho más versátil de lo que imaginas? Hoy, me sumerjo en este delicioso mundo para revelarte cómo este embutido puede transformar tus platos de maneras que nunca habías considerado.
El Arte de Degustar Fuet: Una Guía Personal
Cuando hablamos de disfrutar de un buen fuet, entramos en un terreno muy personal, donde cada uno tiene su propio ritual y preferencias. Hoy, quiero compartir contigo mi forma de explorar y saborear este embutido, que es mucho más que un simple ingrediente en nuestra cocina.
Personaliza Tu Experiencia con el Fuet

La Eterna Duda: ¿Con Piel o Sin Ella?
Para muchos, la piel del fuet es parte de su esencia, aportando esa textura crujiente que contrasta deliciosamente con la suavidad de la carne. Pero también entiendo a quienes prefieren quitarla, buscando una experiencia más suave y centrada en el sabor puro de la carne. Si te encuentras con un fuet con piel de origen sintético, recuerda que esa no está hecha para ser consumida. Por suerte, mi fuet favorito viene embutido en tripa natural, lo que nos da la libertad de elegir disfrutarlo con todo y su envoltura.
El Corte Perfecto: Grueso, Fino, Recto u Oblicuo
Aquí es donde la magia sucede. Cortar el fuet «al bies», es decir, en un ángulo diagonal y no perpendicular, es un pequeño truco que transforma completamente la experiencia. Este tipo de corte, que recomiendo sea de aproximadamente un centímetro, no solo mejora la presentación, sino que también libera más aromas y sabores, haciendo cada bocado aún más deleitable.
Más Allá del Picoteo: El Fuet en la Cocina
Un Ingrediente Versátil
El fuet no solo brilla como protagonista de picoteos y meriendas, sino que también es un excelente aliado en la cocina. Imagina incorporarlo en platos más elaborados, donde puede aportar una profundidad de sabor única. Desde ser el toque especial en una pasta hasta convertirse en un ingrediente sorpresa en ensaladas o tortillas, el fuet tiene el poder de transformar lo ordinario en excepcional.
Conclusión: Tu Fuet, Tu Reglas
En definitiva, disfrutar de un buen fuet es una experiencia única y personal. Ya sea que prefieras saborearlo en su forma más pura, explorar diferentes técnicas de corte, o innovar en la cocina con él, lo importante es que te diviertas y disfrutes cada momento. El fuet es más que un embutido; es una invitación a crear, experimentar y, sobre todo, disfrutar de los pequeños placeres de la vida.
Explorando Sabores: Recetas Únicas con Fuet

Sumergirse en el mundo de la cocina es siempre una aventura emocionante, especialmente cuando se trata de incorporar ingredientes con personalidad, como el fuet. Hoy, quiero llevarte a través de tres recetas que transformarán tu percepción de este embutido y te mostrarán su versatilidad y potencial culinario. ¡Prepárate para sorprenderte!
1. Tartar de Fuet y Tomate: Frescura y Sabor
Ingredientes para una Explosión de Sabor
- Un fuet extra Torre de Núñez: el protagonista, lleno de sabor.
- 2-3 tomates: jugosos y refrescantes.
- 20 gr de cebolla: un toque picante suave.
- 5 gr de pepinillos: un contraste ácido.
- Un chorrito de aceite de oliva virgen extra: para redondear los sabores.
- Surtido de lechuga: la base crujiente.
- Sal: para realzar los sabores.
Preparación: Sencillez y Elegancia
- Comienza por pelar los tomates y la cebolla, cortándolos en pequeños cuadraditos, junto con los pepinillos.
- Corta el fuet en dados similares, buscando uniformidad para una perfecta integración de sabores.
- Mezcla estos ingredientes cuidadosamente, añadiendo el aceite y la sal al gusto, buscando el balance perfecto.
- Utiliza un aro de emplatar para dar forma a tu tartar, colocando el surtido de lechuga alrededor como un abrazo verde que realza el plato central.
2. Paninis de Queso, Fuet y Huevos de Codorniz: Un Toque Gourmet
Ingredientes: Combinación Ganadora
- Media barra de pan: la base crujiente.
- 120 g de salsa de tomate: suavidad y acidez.
- 80 g de queso rallado: fundente y versátil.
- Fuet extra Torre de Núñez: el toque de sabor intenso.
- 4 huevos de codorniz: pequeños pero llenos de sabor.
- Orégano, pimienta negra molida, sal: especias para elevar el plato.
Elaboración: Creatividad al Horno
- Corta el pan por la mitad y disponlo en una bandeja de horno preparada con papel.
- Precalienta el horno a 180ºC y comienza a construir tu panini con una base de salsa de tomate y queso rallado.
- Añade el fuet en cuadraditos y corona con los huevos de codorniz, sazonando con las especias para un acabado perfecto.
- Hornea durante 15-20 minutos hasta que el queso adquiera un tono dorado tentador.
3. Cuscús con Fuet y Melón: Contraste y Armonía
Ingredientes: Un Viaje de Sabores
- 250 g de cuscús: la base suave y esponjosa.
- 3 dl de caldo vegetal: para cocinar el cuscús.
- 150 g de fuet extra Torre de Núñez: sabor en cada bocado.
- 1/2 melón: dulzura natural.
- 1 cebolleta: frescura crujiente.
- Perejil, aceite de oliva virgen extra, pimienta negra molida, sal: el aderezo perfecto.
Preparación: Un Plato Completo
- Comienza con el cuscús, añadiendo el caldo hirviendo para que se hidrate y absorba todos los sabores.
- Una vez reposado, es hora de añadir personalidad con el aceite, el perejil picado, y sazonar al gusto.
- El toque final lo dan el melón y la cebolleta en cuadraditos, junto con el fuet, creando un contraste de sabores que te encantará.
- Deja reposar la mezcla para que los sabores se fusionen, sirviendo este plato como una refrescante sorpresa.
Estas recetas no solo muestran la versatilidad del fuet, sino que también invitan a explorar combinaciones inesperadas, creando platos que son tanto un deleite visual como un festival de sabores. ¡Anímate a probarlas y deja que tu paladar viaje por nuevas sensaciones!